El uso de ingredientes derivados del cannabis en productos de maquillaje gana terreno en el mercado global. Sin embargo, la composición real, la evidencia científica disponible y los criterios regulatorios en la UE y EE UU revelan un panorama más complejo del que proyectan las estrategias de marketing.
El llamado «maquillaje con cannabis» engloba productos diversos que, en la mayoría de los casos, contienen aceite de semilla de cáñamo, un ingrediente no psicoactivo y tradicional en cosmética.+ Este aceite, rico en ácidos grasos esenciales, aporta hidratación y buena tolerancia cutánea, pero no contiene cantidades significativas de cannabinoides. La FDA estadounidense aclara que los productos derivados de la semilla contienen solo trazas de THC o CBD.
Por otro lado, existen formulaciones más específicas que incorporan cannabidiol (CBD) o incluso tetrahidrocannabinol (THC) en mercados donde su uso está regulado.
En todos los casos, el uso tópico no genera efectos psicoactivos. Lo que sí despierta interés es su potencial dermatológico. más aún cuando el CBD ha sido investigado en estudios recientes por su posible utilidad en afecciones como dermatitis atópica, psoriasis o acné. Sin embargo, los datos aún no permiten establecer conclusiones clínicas definitivas, en parte por la escasez de ensayos controlados y las dificultades para vehiculizar el compuesto a través de la piel.
 
				
 
 
