Los trabajadores de la industria de la marihuana medicinal son considerados prioritarios en California para recibir la vacuna COVID-19.
Esto ha generado polémica y ha causado indignación.
Un empleado de un centro de venta de cannabis medicinal en California es hoy considerado en términos de la vacuna igual que un médico o un enfermero trabajando en un hospital.
Ello implica que se encuentran por encima de los trabajadores de las industrias de agricultura y venta de alimentos, producción, almacenaje y transporte, así como también por encima de los mayores de 65 años. Todos ellos forman parte de la categoría 1B.
La principal controversia se ha dado con el sindicato de maestros. California ha sido uno de los últimos estados en determinar la vuelta total a las clases presenciales.
El nuevo gobierno de Joe Biden ha calificado al tema como una prioridad, y Newsom ha anunciado un plan para materializarlo.
Pero el sindicato de maestros ha puesto objeciones alegando preocupación por la salud de sus trabajadores.
Ni el gobierno federal ni el estatal han incluido a los maestros en la lista de aquellos con prioridad para recibir vacunas, pese al reclamo de líderes sindicales.