En los Estados Unidos la marihuana es ilegal a nivel federal, pero en 31 estados, más de la mitad del país, es legal: en algunos no se penaliza su consumo, en otros está limitado a la prescripción médica y en 23 es libre para el uso recreacional.
Esta contradicción genera una serie de conflictos como, por ejemplo, la dificultad de que la industria del cannabis tenga acceso a los servicios financieros.
Para subsanar ese vacío, el Senado se dispone a tratar un proyecto de ley federal que permita que los bancos trabajen con estas empresas. Por una votación de 14 a 9, la propuesta fue aprobada en la Comisión Bancaria de la cámara con el título de Ley de Regulación Bancaria Segura y Justa, cuyo acrónimo es SAFER (más seguro).
El líder de la mayoría, el demócrata Charles Schumer, aseguró que la presentará “al pleno del Senado con toda celeridad”.
De los 14 votos, tres fueron republicanos: se estima que existe un consenso bipartisano para permitir que los bancos puedan participar en el negocio del cannabis. También la industria financiera impulsa la bancarización del sector.
“Esta legislación bipartidista, que se necesita con urgencia, resolverá el actual conflicto entre las leyes estatales y federales para que los bancos puedan servir a la industria del cannabis autorizada por el Estado y a sus empresas relacionadas, así como para mejorar la seguridad pública, la recaudación de impuestos y la transparencia financiera”, dijo en un comunicado la Asociación de Bancos Estadounidenses (ABA). “La situación actual es simplemente insostenible para los consumidores, las pequeñas empresas y los bancos que operan en los estados donde el cannabis es legal”.
Fuente: infobae