Rusia y los países de ideas afines están preocupados por la legalización del cannabis para «los llamados fines recreativos», según una declaración conjunta en nombre de 46 Estados firmada en la serie de sesiones de alto nivel del 67 periodo de sesiones de la Comisión de Estupefacientes de la ONU.
«Estamos profundamente preocupados por la legalización del cannabis para los llamados fines recreativos», reza el documento, cuyo texto fue publicado por la misión permanente de Rusia ante las organizaciones internacionales en Viena.
Según la declaración, estos países comparten las apreciaciones de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) de que la creciente tendencia a permitir el uso del cannabis para fines distintos de los médicos y científicos es contraria a la Convención Única sobre Estupefacientes de 1961.
Desafío
Asimismo, afirma que la legalización del cannabis representa un importante desafío para la comunidad internacional, los Estados partes en las convenciones de lucha contra las drogas, así como para la aplicación de dichas convenciones.
«Hacemos hincapié en el principio de respeto de los tratados internacionales (pacta sunt servanda) e instamos encarecidamente a todos los Estados que son parte en las convenciones pertinentes a que respeten sus disposiciones jurídicamente vinculantes y garanticen su aplicación plena y efectiva», añade la declaración.
El documento también señala los efectos nocivos de la legalización del cannabis para la salud y la seguridad públicas, así como los riesgos crecientes de iniciación a las drogas y adicción entre niños y jóvenes.