El Estado paraguayo otorgó cinco licencias a empresas para la producción, industrialización y comercialización controlada de aceite de cannabis en el país.
Ello no solo servirá para investigar más sobre las utilidades médicas de este compuesto, sino además para ahondar en el conocimiento de la planta.
En esta tarea están comprometidos médicos, biólogos e ingenieros de las ramas forestales y de la agronomía, entre otras especialidades, y las universidades locales estarán involucradas en la investigación del cáñamo.
Para trabajar con la producción del aceite de cannabis, los interesados deben solicitar permiso a la Dirección de Vigilancia Sanitaria del Ministerio de Salud hasta el 31 de octubre. La plantación inicial del cannabis es de cinco hectáreas, pero podrá extenderse a 10. Antes de 2017, el cultivo no estaba legalizado.
Las documentaciones para entregar las licencias serán analizadas por los ministerios de Salud, Industria y Comercio, entre otros organismos.
Actualmente, solo un laboratorio privado está autorizado a importar componentes del cannabis, elaborar localmente el aceite y vender el producto. Pero con la entrega de licencias se ampliará la oferta e incluso se podrá utilizar la producción nacional de cannabis.