Un estudio a gran escala, con datos de más de un millón de pacientes de cuatro continentes, ha constatado que existe predisposición genética hacia la adicción al cánnabis, y que quienes la padecen tienen más riesgo de sufrir cáncer de pulmón.
El hallazgo, publicado este lunes en la revista Nature Genetics, ha sido liderado por la Universidad de Yale y ha contado con la participación, entre otros, de la investigadora de la Universidad de Barcelona, Dora Koller.
“La idea de este estudio parte de que creemos que, a medida que aumenta la permisividad en torno al consumo de cánnabis, se hace necesario comprender los riesgos asociados al trastorno que provoca su adicción para poder desarrollar una farmacoterapia para abordarlo”, ha señalado a EFE uno de los autores, Joel Gelernter, profesor de Genética en la Universidad de Yale.
Entre las consecuencias negativas para la salud conocidas hasta ahora de esta adicción a la marihuana, que desarrollan más de un tercio de las personas que la consumen, están el deterioro de la función cognitiva, además de implicaciones sociales como la disminución de la productividad y el riesgo de accidentes en estado de embriaguez.
Fuente: Milenio